Cuando salí de Colombia, salí considerando la posibilidad de trabajar a cambio de algo, comida y alojamiento, no solo por plata o por un sueldo, era más por el interés de nuevas experiencias y ser parte de proyectos diferentes. No tenía claro en el momento esto como podría funcionar, ya había trabajado como voluntario pero quería algo en intercambio de mi profesión, buscaba algo a largo plazo o que incluyera una experiencia en algún rincón del mundo.
Después de tratar de explicar esta idea a algunos amigos, siempre encontraba más preguntas sin respuesta, con mi esposa encontramos la necesidad de poner estas ideas en una propuesta más formal, ‘en un PDF’, con el fin de compartir nuestros objetivos con amigos, amigos de amigos y organizaciones. Era una propuesta sencilla, pero con un objetivo más claro: ‘trabajar a cambio de comida, vivienda en alguna parte del mundo a cambio de videos, fotos o diseño gráfico’. (Nota: Por cobardía no incluí transporte en la propuesta en ‘PDF’, temía a que fuera un factor de rechazo).
Cuando alguien me preguntaba a mi o a mi esposa “el cómo nos íbamos a sostener durante ese tiempo o cómo íbamos a viajar,” no teníamos ni idea pero siempre decíamos: “Algo resultará…”
En fin, gracias a esa propuesta una organización nos aceptó en Cambodia y la persona que nos contactó en este país también nos mencionó que conocía alguien en Tanzania a quien le podría interesar nuestros servicios .
Ese día cambié los tiquetes de regreso a Colombia desde Estados Unidos por unos a Cambodia, quedarían solo ahorros para vivir unos meses allí – algo resultará.…
En ese momento mi mente estaba casi en ‘shock’, sencillamente se estaban abriendo las puertas que estaba buscando. No sabía que íbamos a encontrar en Cambodia, un país que nunca había considerado visitar y que tuve que buscar en Google para saber donde quedaba.
Después de varios meses en Cambodia y de ganarnos más credibilidad, el llamado de Tanzania – Africa, finalmente llegó y aceptaron nuestra propuesta, en un abrir y cerrar de ojos estaba sentado en un avión rumbo a este país con mi esposa, con todo pago – incluyendo transporte. Todo a cambio de crear unos videos para una compañía de luz solar!
No lo podía creer, estaba nervioso por la responsabilidad de los videos pero me podía mas la ansiedad y curiosidad de visitar ese país. Estabamos más cerca a un Safari que nunca antes, pero el alto costo del mismo nos detenía en imaginarnos viviendo esa experiencia, mientras tanto en mis ratos libres seguía viendo animales salvajes en Youtube.
El proyecto de los videos salió muy bien y a pesar que le dijimos a la empresa que no cobraríamos nuestros servicios porque nos cubrieron todos nuestros gastos. Ellos insistieron en ofrecernos en gratitud un Safari con un conductor y chef privado a Ngorongoro Crater, uno de los mejores lugares del mundo y el sueño de muchos fotógrafos!
Un Safari? simplemente todo lo que había visto muchas veces en Televisión o Internet, lo estaría viendo y fotografiando con mi propia cámara!
Describir mi experiencia del Safari me puede tomar muchos más renglones, simplemente es algo que hay que vivir y ver con tus propios ojos, ahora prefiero compartirte algunas fotos e invitarte a creer que el mundo esta lleno de posibilidades para todos y el dinero no debe poner límite a tus sueños.
Recomendación:
Un Safari no es cualquier viaje o tour que se toma a la ligera, se debe investigar empresas de calidad y profesionales para que esa experiencia sea en realidad única y no una pesadilla como a nuestros vecinos.
